¿Por qué el transporte aéreo es más rentable de lo que crees?

Importar productos a Chile desde el extranjero requiere tomar decisiones logísticas que impactan directamente en el flujo de caja, la experiencia del cliente y la reputación de tu negocio. Durante años, el transporte marítimo ha sido la opción predilecta por su aparente bajo costo. Pero, ¿y si te dijéramos que el transporte aéreo, aunque más costoso en apariencia, puede resultar mucho más rentable en términos reales?

En este artículo revisamos las ventajas del transporte aéreo como alternativa estratégica de importación. Desde los tiempos de entrega hasta su impacto en costos y eficiencia, analizamos los factores clave que deberías considerar antes de decidir cómo traer tus productos al país.

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En el mundo de las importaciones, muchas decisiones se toman en función de un solo criterio: el costo inmediato. Es común que los importadores elijan el transporte marítimo simplemente porque el flete por kilo es más bajo. Sin embargo, esta visión parcial ignora una realidad mucho más compleja: el costo total de traer un producto del extranjero no se limita al valor del transporte.

Cuando hablamos de rentabilidad, debemos considerar el tiempo en tránsito, el impacto en el flujo de caja, los costos asociados a almacenaje y stock inmovilizado, los riesgos operativos, y las consecuencias de no cumplir con plazos frente a clientes exigentes. Cada día que un producto está detenido en puerto, almacenado sin venderse, o demorando una operación crítica, es dinero que se escapa del negocio.

El transporte aéreo, aunque a primera vista parece más caro, ofrece una rentabilidad superior cuando se analiza desde una perspectiva integral.

Uno de los beneficios más evidentes del transporte aéreo es la velocidad. Mientras un contenedor marítimo desde Asia puede demorar entre 30 y 45 días en llegar a Chile, un envío aéreo puede completar el mismo trayecto en menos de una semana. Esta diferencia de tiempos transforma la forma en que se gestiona el inventario, permitiendo una mayor rotación, respuestas más rápidas al mercado y una clara mejora en el flujo de caja.

Además, el transporte aéreo está expuesto a menos variables externas. No depende de las condiciones portuarias, huelgas prolongadas o congestión en terminales marítimas. Esta trazabilidad y control se traduce en menos reclamos, menos demoras y mayor tranquilidad.

En sectores como tecnología, salud, repuestos industriales o moda de temporada, cada día cuenta. El transporte aéreo permite abastecer rápidamente a canales de venta, responder a la demanda sin sobredimensionar el inventario, e incluso aprovechar ventanas comerciales que, de otro modo, se perderían por falta de stock.

Ventajas clave del transporte aéreo:

• Tiempos de entrega significativamente menores.

• Control y trazabilidad de extremo a extremo.

• Ideal para productos urgentes o de alto valor.

• Mayor rotación y eficiencia del inventario.

El flete marítimo puede tener un precio atractivo, pero esconde una serie de costos indirectos que muchas veces pasan desapercibidos. Uno de los más comunes es el demurrage.

El demurrage es una penalización por dejar un contenedor en puerto más allá del tiempo permitido.

A esto se le suman costos por:

• Almacenaje portuario prolongado

• Falta de coordinación logística o trámites aduaneros lentos

• Retrasos por congestión o huelgas

• Deterioro o pérdida de productos sensibles

Además, hay un costo mucho menos visible pero igual de importante: la pérdida de oportunidad. Si un pedido no llega a tiempo, no solo se pierden ventas, sino también la confianza del cliente. Este tipo de daño a la reputación es difícil de cuantificar, pero sumamente costoso en el largo plazo.

No todos los productos ni todas las operaciones requieren transporte aéreo. Sin embargo, hay escenarios en los que esta modalidad se convierte en la mejor opción:

• Cuando se trata de bienes de alto valor por unidad.

• Si trabajas con inventarios ajustados o reposiciones frecuentes.

• Cuando vendes productos sensibles al tiempo (moda, salud, tecnología).

• Si tu operación exige regularidad, agilidad o trazabilidad constante.

• Cuando importar desde ciertos países representa mayores riesgos logísticos (China, India, etc.).

En mi empresa SES Chile entendemos que el verdadero valor para nuestros clientes no está solo en mover productos, sino en eliminar la fricción de todo el proceso. Por eso ofrecemos soluciones completas de importación vía transporte aéreo, con servicio puerta a puerta, desde cualquier parte del mundo.

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El transporte aéreo, lejos de ser una opción exclusiva para casos de urgencia, es una herramienta logística que puede generar ventajas competitivas reales. En un entorno globalizado donde los tiempos de respuesta marcan la diferencia, elegir esta modalidad puede transformar la manera en que importas y gestionas tu cadena de abastecimiento.

A la hora de calcular la rentabilidad de una importación, no basta con mirar el precio del flete. Hay que considerar todo el impacto operativo, comercial y financiero. Y en esa mirada completa, el transporte aéreo no solo compite: muchas veces gana.

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